El grupo de gobierno rechaza auditar la gestión del año 2024 en la JuntaGeneral de la Sociedad Municipal de Promoción y Desarrollo, obligada acelebrarse por orden del Juzgado

Por primera vez en la historia, un juez de lo Mercantil ha obligado a un
alcalde de Guía a convocar una Junta General de la Sociedad Municipal. La
sesión extraordinaria, celebrada hoy, vuelve a situar en el centro de la
polémica la gestión de Alfredo Gonçalves.
La Junta General apenas duró quince minutos y, de manera insólita, se
celebró en un pasillo del terrero de lucha Salustiano Álamo en lugar del
salón de plenos del Ayuntamiento. La negativa de Alfredo Gonçalves a
someterse a una auditoria de gestión es otra muestra de opacidad, falta de
respeto institucional y desprecio hacia el derecho de los guienses a conocer
cómo se usan sus impuestos.
“Lo que exigimos no es un simple formalismo contable, sino una revisión
profunda de los procedimientos y del destino del dinero público”, afirmó el
portavoz Pedro Rodríguez, ante la insistencia del alcalde en confundir una
auditoría de cuentas con una auditoría de gestión para evitar ser fiscalizado.
El rechazo a encargar una auditoría de gestión independiente y a facilitar
información sobre movimientos bancarios, contratos y subvenciones
vinculadas a eventos como la Copa Princesa, la Feria de Arte y
Empresarios o el Festival del Terror, evidencia, según Juntos por Guía, una
intención clara de ocultar datos y dejar abiertas las sospechas de posibles
irregularidades.
Como cómplices de esta estrategia, Juntos por Guía señala a los concejales
Juan Jiménez, José Manuel Santana, Alejandro Rivero, Alejandra García,
Ruth Martín, Julián Melián, José Estévez y Nayra Pérez, que con su voto
han impedido esclarecer los hechos por los que el propio alcalde acusó
públicamente al ex concejal de deportes Felipe Pérez. Una actitud que, a
juicio de Juntos por Guía, refuerza las dudas sobre si las irregularidades
parten de la propia gestión de Alfredo Gonçalves.
Desde su llegada a la Alcaldía hace un año, el alcalde ha negado de forma
sistemática el acceso a información básica solicitada por Juntos por Guía,
despreciando el deber de fiscalización y control de la oposición.
Juntos por Guía recuerda que es la ciudadanía quien exige claridad.
Negarse a aprobar esta auditoría de gestión es un paso más en la pérdida de
confianza de los vecinos hacia el actual grupo de gobierno.