El Cabildo de Gran Canaria requisa el agua que abastece al municipio de Guía para garantizar el suministro a sus vecinos

  • a Corporación Insular ha indicado que se trata de una solución que puede demorarse, al menos, una semana. Para paliar de forma inmediata los cortes en el avituallamiento que padecen los vecinos de 1.070 viviendas de la localidad, la única opción es recurrir al bombeo de agua desalada y cubas

El Cabildo de Gran Canaria ha iniciado un expediente para requisar el agua que abastece a los altos y las medianías del municipio de Santa María de Guía, cuya población está afectada desde hace días por el corte de suministro, con el fin de poder garantizar el recurso a todos los vecinos.

El consejero insular de Aguas, Miguel Hidalgo, ha asegurado que, al mismo tiempo que se inicia el expediente, se mantendrán negociaciones con el Consorcio de Aguas de Gran Canaria para intentar buscar una solución al conflicto, que ha provocado el corte de suministro de agua de abasto a 1.070 viviendas del municipio grancanario. Hidalgo ha señalado que, si se acredita un mal uso del agua, el Consorcio la requisará, pues se trataría de “un uso indebido de un bien público”.

Tanto el Consorcio Insular de Aguas como el Ayuntamiento de Santa María de Guía y de Gáldar atribuyen el corte a una “decisión unilateral” del presidente del Consorcio de Regantes del Noroeste de Gran Canaria, José Reyes, no exenta de connotaciones políticas.

En concreto, el alcalde de Santa María de Guía, Pedro Rodríguez, ha vinculado la decisión de Reyes de cortar el agua a una moción presentada por CC en el Ayuntamiento de Santa María de Guía, que fue rechazada. Rodríguez ha detallado que el corte ha obligado a suministrar alrededor de un millón de litros de agua con cubas durante esta Semana Santa, con unos coste de unos 10.000 euros para el Ayuntamiento de Guía.

A esta situación que sufren las viviendas se une también el corte de agua de riego a muchos agricultores de la zona por parte del Consejo Insular de Aguas ante el impago del Consorcio de Regantes del Noroeste. Los agricultores aseguran que sí han pagado al Consorcio, pero dicen que este a su vez no lo ha hecho al Consejo Insular de Aguas, razón por la que ahora se ven perjudicados. “Los agricultores son rehenes del impago, al igual que los vecinos”, ha asegurado el alcalde de Guía.

El consejero de Aguas ha afirmado que “hay una clara actitud de no pagar el agua de los agricultores aun sabiendo que les perjudica, y no hay voluntad de llegar a un acuerdo” al respecto.

El alcalde de Gáldar, Teodoro Sosa, considera que la situación es “un chantaje” por parte de alguien que utiliza el agua “como un cacique”. “No podemos permitir rehenes ni caciques que utilizan el agua en período electoral”, ha dicho Sosa.

El alcalde de Guía ha urgido a la requisa para los barrios afectados, cuyos trámites pueden demorarse una semana, y ha asegurado que, hasta que se resuelva, la única manera de asegurar el suministro es con el bombeo de agua desalada y cubas.

“No es una solución para mañana”, ha lamentado, al tiempo que ha insistido en que Guía no tiene un problema de producción de agua, sino de suministro.

El consejero del Cabildo ha anunciado la creación de una mesa de trabajo y una auditoría para analizar todos los elementos alrededor de la producción de agua, con el fin de tener menos dependencia de comunidades que puedan hacer un mal uso de ella.

En su opinión, es necesario evitar monopolios sobre al agua “con prácticas caciquiles” que puedan generar escasez tanto a los agricultores como a los ciudadanos en general. Asimismo, cree necesario disponer de agua pública en altura en el noroeste de Gran Canaria, para lo que se promoverá la compra de pozos y galerías, tal como se ha hecho en otros lugares de la isla.